Dos personas murieron ayer al caer la avioneta tipo ultraliviano en la que se desplazaban, sobre la zona rural de Las Chacras, a 7 kilómetros de Bariloche, informó la policía. El pequeño aparato era un avión civil P130, matrícula LV-X247, que había despegado minutos antes del aeroclub Nahuel Huapi, a 20 kilómetros del aeropuerto internacional de Bariloche, para realizar un vuelo local.
La aeronave se precipitó a tierra a las 11.20 de una altura aún no determinada, por causas que se investigan, según precisaron voceros de la Fuerza Aérea Argentina. Los fallecidos fueron identificados como Ernesto Restelli y Daniel Corradazi, dijo el jefe de bomberos de la zona del siniestro, César Garnica. Corradazi era mecánico del aeroclub Nahuel Huapi y era oriundo de Bariloche al igual que Restelli, quien diseñó y construyó el avión.
Los cadáveres fueron trasladados hacia la morgue judicial para luego ser entregados a los familiares de las víctimas.
Según voceros de la Fuerza Aérea, el aparato siniestrado es de tipo ultraliviano y cayó en la finca La Ponderosa, a unos 1.000 metros de la ruta nacional237, que comunica Bariloche con la provincia de Neuquén.
La Junta de Investigación de Accidentes de Aviación Civil trabajaba en la zona del siniestro, a efectos de determinar las causas de la caída de la nave.
Especialistas locales en aviación dijeron que "probablemente (el avión) haya recibido una corriente de viento descendente que lo precipitó a tierra". La avioneta, que estaba habilitada para volar, "se cayó aparentemente a pique porque no se observa que haya rebotado en tierra", informaron agentes de la policía aeronáutica de Río Negro.
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La Ciudad
