Santiago . - Augusto Pinochet regresó ayer a Santiago desde su finca costera para someterse a partir de hoy a los exámenes médicos ordenados por el juez Juan Guzmán Tapia, previos al interrogatorio que se realizará el próximo lunes, informaron fuentes de su defensa.
El ex dictador chileno confirmó así lo que ya habían adelantado sus allegados, en el sentido de que, tras el cambio de programa establecido por el juez, finalmente se sometería a las pericias médicas que eludió el pasado domingo, fecha original fijada por el magistrado.
Así, tras la negativa de sus defensores a que se presentase en los plazos establecidos -que lo dejó a un paso del desacato-, Pinochet se someterá finalmente a los exámenes médicos en el Hospital Militar.
Desde el pasado jueves, el ex dictador se encontraba en su finca de Los Boldos, a 130 kilómetros de Santiago, y fue visto en público el domingo, cuando asistió a misa, mientras el juez y los médicos encargados de examinarlo lo esperaban en el Hospital Militar de Santiago.
Los exámenes a los que se someterá Pinochet tienen por objeto determinar si está en condiciones mentales y neurológicas de comparecer en juicio. Ayer se especulaba que Pinochet ingresaría en cualquier momento en el nosocomio.
Los abogados querellantes, en tanto, manifestaron su esperanza de que esta vez Pinochet respete las fechas dispuestas por el juez, sobre todo la del interrogatorio fijado para el lunes próximo en la quinta que el ex dictador posee en la localidad de Bucalemu, según precisó el abogado Eduardo Contrera. Por su parte, uno de los letrados defensores, José María Eyzaguirre, señaló que, a pesar de las nuevas condiciones puestas por el juez Guzmán Tapia, seguirán adelante en el pedido de remoción que ya presentaron ante la Justicia.
Así, cambiando una postura de rebeldía, la defensa del acusado dio un paso a favor de los procedimientos legales al comunicar el lunes el domicilio del ex dictador para la entrevista con el magistrado.
Casi simultáneamente, Guzmán decidió nuevas fechas para los exámenes médicos y el interrogatorio, que originariamente estaba fijado para ayer y que se concretará el próximo lunes. Pinochet está sindicado como autor intelectual de 75 fusilamientos cometidos en cinco ciudades del país por una misión represiva del ejército en octubre de 1973, al mes siguiente del golpe de Estado y el comienzo de la dictadura que se mantuvo hasta 1990. Las diligencias fueron dispuestas por el juez Guzmán Tapia, que instruye 204 querellas por los abusos criminales del régimen pinochetista.
El temor a ser nuevamente procesado por Guzmán Tapia habría llevado a Pinochet a aceptar someterse a los exámenes médicos. Según dejó entrever al diario electrónico El Mostrador el vocero del octogenario militar, general retirado Guillermo Garín, las razones de la defensa para acceder ahora a las pericias médicas tiene más que ver con la inevitabilidad de un eventual auto procesamiento que con la calidad de los chequeos.Antes de que el juez fijara por segunda vez el cronograma de las diligencias, Pinochet se arriesgaba a ser procesado de inmediato por su negativa de someterse a los peritajes clínicos y a ser interrogado.
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La Ciudad
