Cartas de lectores

Cumplir cuarenta años

En momentos tan difíciles para el país, donde la desazón parece invadirnos cotidianamente, llegar a los 40 años es tiempo de reflexiones. Uno se pone a pensar si sus metas se cumplieron, si los errores superaron los aciertos, si todavía es tiempo de emprender nuevos rumbos. Es tiempo de mirar la familia formada, ver a nuestros hijos e imaginar el futuro. Es tiempo de sostener a nuestros padres, de no repetir sus frustraciones y aprender de sus enseñanzas. Tiempos donde se van dejando de lado cosas valiosas, como la poesía, la lectura, las reuniones de amigos, caminar a orillas de nuestro río, y tantas, tantas cosas que resignamos día a día por no tener ganas, ni tiempo, ni presupuesto que alcance. En estos tiempos tan difíciles hacer una reunión con los amigos de siempre donde llorar y reír parece una utopía. Sin embargo, no es imposible y gracias al amor de mi esposa, mi compañera, pude vivirlo tan intensamente, esa noche de cumpleaños que será imborrable y constituirá una inyección de fuerza, de oxígeno para seguir luchando, para seguir creyendo en una vida mejor, en un país en serio, en la felicidad, en la amistad y en el amor. Gracias a ella y a mis amigos de siempre.

Arístides Alvarez